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Contención quebrada




Ella estaba ahí, vacilante y un poco tensa, sola. Un primer acercamiento, ese roce que comunicó una alerta a la central, la cual pidió calma pues podría ser un accidente así que simplemente contuvo la respiración y nada, ni un ápice se movió. Volvió a ocurrir, la central comenzó a encender las alarmas, la circulación aumento y el bombeo iba demasiado rápido porque se detuvo encima de ella, tres segundos después la acarició. Tanta alteración le hizo comprender lo sola que se sentía, el aislamiento hacía inevitable que cualquier situación la emocionara. Lástima de sí o seguir el momento, decidió olvidarse de ella misma y sonrió. Por fin, a la par que la acariciaban lo tomó con firmeza. Las dos manos hicieron el amor y de su acoplamiento una flor nació.

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