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Sé de poco lo mucho que te extrañaré



Sé de alguien corazón de pollo que se hacía lluvia en las despedidas, y de otro que repetía la presencia a punto de la partida.

Sé de una isla en la que la salida de alguien se vuelve tristeza nacional, pues no se sabe si volverá el que cruza el mar.

También sé de la historia de la Matilde y su filosofía de "mejor buenos recuerdos que un pasado al olvido"...

pero no sé cómo continua el cuento de la lejanía y menos cómo dormir tranquila sin que me abraces y leas una de esas de Ibargüengoitia o de la lista interminable de lecturas pendientes que nos inventamos y a veces cumplimos y otras tantas no,

y en definitiva no sé que es eso de despertar sin reír y bailar contigo.

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