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¿Y mi cuadernito dónde está?

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Utiliza la escritura como evasión ¿qué no lo ve? Además cada que alguien se le acerca intenta morderlo, un pedacito no más, dice con su maldita voz de buena gente. Si no escribiera también... Claro, si no escribiera tan bien y no dejase tantas regalías, ¿no? Bueno pero sino de dónde comía y de qué vivía, yo no estoy en condiciones, usted lo sabe, y pues bueno, he de cobrar alguito hasta por recordarle que use calcetines, sino el pobre ya muerto de pulmonía estaría.

En fin, sabe que esas pastillas no se las tomará y que si lo hace dejará su ritmo: tres cuartillas por día religiosamente. Cuando murió su madre salió hasta terminar las benditas tres, solo cuando murió el cholo interrumpió para pedirme que lo sacara de su cuarto y lo enterrara en el patio, para que eternamente lo cuidara. Y si de por sí es imposible, si deja de escribir como hasta ahora se vuelve loco.

No se ría, que no es broma, usted no lo ha visto. Hace tres años sufrió una crisis, no podía con la página en blanco que todo escritor novato supera, pero para él, con su ego y sus años de experiencia, eso se tornó infernal. ¿Que qué hizo? Pues esa horrible cicatriz que dice es de nacimiento fue por quebrar el vidrio del ventanal. ¡Soy libre! gritó como pajarito, y ya lo ve, no solo es débil sino torpe e idiota, antes de brincar y llegar afuera tropezó y cayó en el marco de la ventana, con los cristales puntiagudos... Y yo, me hubiera visto tratando de sacar tanta sangre, pobre de mí, tres días sin dormir no solo por el herido, el olor me disgustaba tanto que cambié el piso, sí, nadie podía en esas condiciones, y claro, como se lo imagina nadie quiso ayudar (malditos insensibles).  Y él, él como si nada, luego de su fallido lanzamiento a la libertad y de que yo no pegara un ojo para descansar, él como si nada, que ya le dije, lo único fue que descubrió cómo ir contra las páginas en blanco y por otros dos días no me dejó dormir, me puso a colorearlas.

* Imagen de Intton Godelg

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